Quién no ama o desea deleites, placeres y más aún, que los mismos sean intensos o no terminen nunca. En ocasiones en una cena o una velada extraordinaria, con personas fabulosas, el único deseo que pasa por la mente de la persona es que esa noche no termine nunca.
Sin embargo, el amor a los deleites y placeres trae consigo, quiérase o no, pobreza. El exceso en estos gustos, según enseña el Proverbio, será el que también genere necesidad.
En base a los principios financieros, no existe una prohibición expresa a evitar aquello que genera goce o satisfacción. La cuestión pasa por el hecho de determinar, acondicionar y congeniar eficientemente nuestro ánimo con nuestro presupuesto.
Si nuestro presupuesto lo permite, pues es claro que tendremos dinero para ciertos gustos, una buena cena en un lugar lindo, unas hermosas vacaciones, etc.
Recomendaciones para vivir mejor:
- Si el presupuesto no da, no nos endeudemos por deleites;
- Determinar o programar con anticipación gastos especiales, como la cena para enamorados, cumpleaños, etc., para que el gasto no sea una sorpresa, sino provenga del ahorro y sea un deleite.
- Reconocer los gastos superfluos o simplemente de placeres que desgastan nuestra economía.
- Juntarnos con personas de nuestro nivel financiero que también sean prudentes e inteligentes a la hora de gastar.
- Por último, si no lo "necesito" ni es "urgente", no lo compro.
- ⛵ LA CANOA En un largo río, de difícil travesía, había un canoero que atravesaba a las personas de un lado para el otro.. En uno de los ...
- El conocido Salmo 23 El Señor es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de r...
- I. Escucha: sin interrumpir. II. Disfruta: sin quejarte. III. Habla: sin acusar. IV. Confía: sin titubear. V. Da: sin escatimar. VI. P...
FACILVIVIR.blogspot.com |
No hay comentarios.:
Publicar un comentario