Dale una excusa a la excusa y déjala ir.
¿Estás cansado? Duerme más temprano, el dormir tarde te debilita, pues el sueño no se recupera. La siesta también es importante.
¿No estás en forma? Haz más ejercicio, dado que eso tonifica tus músculos, incluso el músculo mental.
¿No tienes más tiempo? Deja de ver tanta televisión y redes sociales, son horas desperdiciadas, que no tienen retorno.
¿No tienes dinero? Consigue otro empleo o ahorra más, gasta menos. Prioriza tú futuro.
¿Es demasiado difícil? Empieza poco a poco, y pruébalo. El monte Everest no fue escalado a la primera, y hasta el día de hoy, se necesita de mucha práctica, paciencia y esfuerzo para llegar a la cumbre.
¿No sabes nada? Lee más libros.
¿Estás bajo de energía? Come más saludable. Deja a un lado la coca -cola.
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